viernes, 14 de noviembre de 2014

Hay una cosa que te quiero decir

Hay una cosa que te quería decir. Bueno, quien dice una, dice mil.
1. Eres el arquitecto de mi felicidad. No digo que pongas los cimientos, esos estaban ahí. Pero, sí que los refuerzas cada día con un material único que la fortalece.
2. Eres mi paraguas de colores en los días grises de lluvia. Da igual que caiga un chaparrón de esos que calan los huesos, si estás a mi lado. Y me refiero tanto a las gotas de agua como a los problemas de la vida.
3. Como todo ciclo, llega el invierno con su frío polar. Pero, hablo de la estación del año, no del invierno emocional. Desde que entraste en mi vida, mi corazón es una constante primavera que  no para de florecer.
4. El frío no me importa tanto si tengo de manta tus abrazos de oso dándome calor. Y no solo ese calor que abriga la piel. Calor que impide que se enfríen los sentimientos.
5. No me aburre la rutina si estás en ella. La "rutina" de besarte, de abrazarte, verte... prefiero llamarlo otro día favorito que se marca en el calendario de la memoria.
6. Ningún día es igual. Al menos una cosa es diferente. Cada día te quiero más que el anterior y menos que el siguiente.
7. Me gusta entrelazar mis dedos con los tuyos. Es como un ancla de seguridad. No me da tanto miedo caer porque ahí estás tú para ayudarme a levantar la cabeza de nuevo.
8. Ni la oscuridad me da miedo. Solo está la luna para ser testigo de nuestros juegos. Y, si no veo, me das la mano para que no me pierda en la penumbra.
9. ¿Y esas mariposas  que dicen que se notan en la tripa? ¿Qué es eso? ¿Un cosquilleo? Yo al verte siento un zoo entero recorriendo mi cuerpo. La selva se desata ahí dentro.
10. He dejado mi adicción al café. Prefiero el color de tus ojos cuando me miran. Aunque más que despierta parece que esté en un sueño.
11. Hoy es viernes ¿o no? Da igual. Desde que estás a mi lado da igual que sea lunes que sábado. O lunercoles, juernes o vierningo. ¿Puede ser 14? Tal vez. Pero como si es el día 43 del mes. Del único que me acuerdo es del 21.
12. Los días no son buenos o malos. Prefiero llamarlos "contigo" y "sin ti". Y, de estos últimos no quiero muchos. Cuantos menos haya mejor.
13. Eso de que te de un vuelco el corazón, ¿qué es? El mío da brincos de felicidad cuando te ve. Y cuando me abrazas o me besas...traspasa todos los límites de velocidad. Por no hablar de cuando sonríes, lo que hace ahí mi corazón se escapa a la razón humana.
14. Hablando de tu sonrisa, no he visto aun nada más bonito en el mundo. Más bien desaparece el mundo entero cuando te veo sonreír.
15. Y no digamos ya cuando te ríes. Esa risa que...uf es como un orgasmo emocional. No dejes de mostrar tu felicidad de esa manera.
16. Tu cuerpo...mi manta...tus lunares...mi mapa... tu piel...mis manos...bueno, sobran las palabras. Ahí prefiero la acción. La práctica es mejor que la teoría.
17. Tu voz, ¿hay sonido más bonito? No, no lo creo. Bueno no, seguro que no lo hay.
18. Y si hablas para decirme...como es eso tan bonito...ah sí, "Te quiero" al oído...no se oye nada más en ese momento.
19. Pero no siempre un te quiero sale de los labios. Hay millones de formas de expresarlo. Un "cuídate pequeña, que no quiero que te pase nada". Un "buenas noches cari", "buenos días mi niña"...millones de gestos que no lo dicen pero lo expresan.
20. ¿Y tus labios? No sabía que en un beso se podía sentir tanto. ¿Energía solar, eólica, atómica...? Energía es lo que se siente con un verdadero y sentido beso. Energía la que me das tú.
21. Tiempo...lo  relativo que es el tiempo. Las horas sin ti son eternas. Los días contigo pasan como horas, como minutos. Los minutos a tu lado no existen. Son momentos únicos, de esos que te dejan sin respiración. Y, sin embargo, te dan aliento.
Tiempo, el que me sabe a poco a tu lado. Y me sobra cuando no te tengo. El que pararía para poder disfrutar sin límites contigo. El que quiero perder la cuenta de lo que ha pasado y el que quiero pasar a tu lado.
22... Podría estar así hasta las mil cosas que te iba a decir. Pero, ¿para qué escribir más? Prefiero susurrártelo al oído, decírtelo con la mirada, en caricias, en sonrisas. No hacen falta decirte lo que ya sabes, lo que cada día te intento demostrar. Lo que no quiero dejar de decirte, con palabras o en silencios.

 
 
 


1000....TE AMO